Un estudio hecho por la psicóloga Ann Kearney-Cooke comprobó que para verse bella hay que sentirlo.
Para nadie es un secreto que un conflicto que tienen las mujeres hoy es reconocer su propia belleza. Preguntas y juicios como ‘¡Estoy gorda!’, ‘Me veo mal, ¿cierto?’ o ‘Si fuera más alta o con el pelo más liso’ son recurrentes entre ellas.
Según estudios de la marca de productos de cuidado personal Dove, 8 de cada 10 mujeres se sienten angustiadas por su apariencia física.
“La autopercepción de las mujeres siempre ha sido un tema de discusión, pues muchas, literalmente, luchan por reconocer su propia belleza y esto afecta seriamente su vida diaria”, explica a EL TIEMPO la sicóloga Ann Kearney-Cooke, autora de libros como Cambia tu mente, cambia tu cuerpo: sentirte bien sobre tu cuerpo y sobre ti misma después de los 40 y La vida que quieres: motívate, pierde peso, sé feliz (hecho con el también sicólogo Bob Green).
Kearney-Cooke decidió participar en un pequeño experimento con Dove, pues esta empresa pretende “crear un mundo donde la belleza sea una fuente de confianza y no de ansiedad” y así demostrar que aquella es un estado de ánimo, que quien se sienta bella cuenta con la confianza para serlo y que los otros lo vean.
Participaron diez mujeres. En el día uno hablaron con la experta, quien les dijo que tenían que utilizar unos parches en sus brazos, parecidos a los que funcionan para dejar de fumar, pero con una tecnología ‘revolucionaria’ para sentirse bellas.
Tenían que usarlos durante 15 días. En ese proceso iban contándole a la psicóloga qué iban sintiendo… Cada vez sonreían más y, además de sentirse bellas, la gente lo notaba. Lo que no sabían era que los parches no tenían absolutamente nada. “¿No hay nada en el parche?”, preguntaban asombradas.
¿La conclusión? “La belleza, definitivamente, es un estado mental. Cuando se deja a un lado la ansiedad de verse perfecta, hasta de hacerse cosas que no son necesarias para el cuerpo –como plancharse el pelo excesivamente si es muy rizado o maquillarse de más–, ese estrés deja de verse, dejan de verse preocupadas” –agrega Kearney-Cooke–. En el video se puede notar cómo estas mujeres con solo mostrar una sonrisa de confianza y un rostro tranquilo irradian belleza.”
Ya decía la cantante estadounidense Beyoncé, considerada hace unos años la mujer más hermosa del planeta por la revista People, que “una mujer es lo más hermoso que puede ser cuando sonríe”. No formó parte del estudio, pero reafirma el poder de sonreír.
Fuente: www.eltiempo.com/estilo-de-vida/gente/la-belleza-verla-o-sentirla/13983816